CEGAL defiende la pervivencia del Ministerio de Cultura y la continuidad en las políticas de fomento de la lectura
Ante las próximas elecciones generales del 23J, la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros defiende la existencia de un Ministerio de Cultura, con la pervivencia de la Dirección General del Libro, del Cómic y de la Lectura; con presupuestos propios y la posibilidad de dar continuidad en el tiempo a los proyectos que inciden en el fomento de la lectura y el apoyo a las librerías independientes.
Madrid, 13 de julio de 2023 – Tanto la cultura, como el libro y la lectura, deben seguir siendo una prioridad de Estado.
Ante la celebración de las elecciones generales del próximo 23 de julio, la Confederación Española de Gremios y Asociaciones de Libreros (CEGAL) defiende la pervivencia del Ministerio de Cultura y de la Dirección General del Libro, del Cómic y de la Lectura, con presupuestos propios y al mismo nivel que otras carteras consideradas fundamentales para el desarrollo social y económico de nuestro país.
CEGAL estima que sólo así se podrá dar continuidad a las políticas de fomento de la lectura ya iniciadas y acometer futuras estrategias.
El emprendimiento de nuevos proyectos es otra de las razones que justifica esta pervivencia, como son, en opinión de CEGAL, una mayor colaboración entre Educación y Cultura que permita, por ejemplo, mejorar los actuales índices de comprensión lectora del alumnado o apostar decididamente por las bibliotecas públicas y escolares como espacios lectores, de encuentro y de creación, o la reforma en la Ley de Contratos Públicos que apoye al tejido cultural de cercanía y a la pequeña y mediana librería.
CEGAL recuerda que la existencia de un Ministerio de Cultura, así como el trabajo de interlocutores especializados, han sido claves para la supervivencia del sector del libro ante la crisis de la COVID-19, tanto a través de la gestión ágil y eficaz de las ayudas extraordinarias y de los fondos europeos, pero también por la puesta en marcha de una serie de iniciativas.
Entre estas se encuentran el Plan de Fomento de la Lectura 2021-2024 “Lectura Infinita”, el apoyo a la externalización de creadores y editoriales, la visibilización del cómic o el Bono Cultural Joven, que, aunque mejorable en su ejecución, ha atraído a nuevos lectores, ha favorecido al comercio de proximidad y ha reforzado el valor comunitario.
En este contexto, no sólo los hábitos de lectura han aumentado durante los últimos años (un 67,2% en 2018 frente al 68,4% en 2022), sino que el sector editorial español creció un 1,1% en 2022, mientras no lo hacía en otros países europeos, y las librerías independientes están siendo capaces de sostener la competencia de las grandes plataformas tecnológicas, con su crecimiento y su presencia dinámica en barrios y municipios como agentes culturales de proximidad.
Si durante el confinamiento la lectura demostró ser un hábito positivo para el entretenimiento o el conocimiento, para la salud y el bienestar, desde CEGAL consideran que en la actual coyuntura de inestabilidad e inseguridad, ante los desafíos políticos, medioambientales y tecnológicos que se plantean, se hace todavía más necesario incentivar la lectura como herramienta básica de orientación, de juicio y de criterio, potenciando a todos los agentes que intervienen en el proceso entre los autores y los lectores.
Frente a aquellos programas políticos que obvian por completo los asuntos culturales o a aquellos que se limitan a potenciar el libro digital en la escuela, CEGAL sostiene que las industrias culturales representan un 2,2% del Producto Interior Bruto, situándose en el 3,2% si se incluyen las actividades vinculadas con la propiedad intelectual, y que, además de por su potencial económico, el libro y la lectura destacan por su valor social, integrador e innovador.
De ahí que sea inadmisible dar un paso atrás en la autonomía y ejecución de políticas culturales que, actualmente, cuentan con la amplia participación del sector del libro y que deben ser mejoradas en consenso.